El artista plástico orureño, Wilson Zambrana Delgado, participó de dos encuentros de muralistas en el exterior del país, donde pudo conquistar México con las propuestas artísticas que ahora son parte de un legado importante junto con otros artistas del mundo.
Las actividades fueron el Segundo Encuentro Internacional de Muralismo FINI (Festival Internacional de la Imagen) 2015 en el Estado de Hidalgo y el Segundo Encuentro Internacional de Muralistas Colonia Morelos 2015 México, donde su estilo predominó.
El primero fue organizado por la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, en forma conjunta con el Movimiento Internacional de Muralistas "Italo Grassi", además del Movimiento de Muralistas Hidalguenses. Este encuentro se efectúo bajo la consigna "La justicia: logros, luchas y utopías de la humanidad", que se realizó, en la primera etapa, en la ciudad de Actopan-Hidalgo, del 5 al 15 de mayo.
Consecutivamente se realizó en la segunda etapa y bajo la misma consigna, el Segundo Encuentro Internacional de Muralistas Colonia Morelos 2015, que se llevó a cabo en el municipio de Mixquiahuala-Hidalgo, del 16 al 23 de mayo, con la intervención de varios artistas internacionales.
A este encuentro internacional respondieron artistas muralistas de diez países como Argentina, Bolivia, Italia, España, Uruguay, Chile, Nicaragua, Colombia, India y México, todos ellos con un mismo objetivo; crear un mundo mejor a través de las imágenes donde se plasmaron diversas reflexiones sobre la justicia.
En México que tuvo un desarrollo muralístico reconocido a nivel mundial se le dé aún relevancia importante al muralismo, hace evidente el resurgimiento de esta expresión artística con planteamientos acordes a la realidad contemporánea, en estas tres semanas de intensa actividad se intercambiaron distintas maneras y procedimientos que emplearon los artistas frente al muro.
"En Actopan a mí me tocó pintar dos sectores de un mural circular gigantesco colectivo titulado "Crisol de Razas", en él plasmé imágenes representativas de las culturas prehispánicas, azteca, maya, tolteca, tiahuanacota, inca y guaraní; como un homenaje a la justicia que desarrollaron nuestros ancestros", comentó Wilson Zambrana a su retorno a Bolivia.
"En Colonia Morelos pinté un enfoque del levantamiento a la revolución mexicana, plasmé el retrato de Pancho Villa con una alegoría representativa del liderazgo hacia la justicia social. La recepción y atención de México fue muy cálida. Fue un intercambio de arte en todas sus expresiones: pintura, música, baile, gastronomía, entre otras", concluyó.
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